El ministro de Gobierno, Gabriel Martínez, dio a conocer que quedó suspendido el encuentro por Copa Libertadores de América que debían jugar el Independiente del Valle y el Gremio de Porto Alegre, a causa de dos casos positivos de COVID-19 en la delegación brasileña.
“La salud de los ecuatorianos está por encima de un partido de fútbol”, dijo Martínez, quien recordó las medidas que se ha tomado en los últimos días que contemplan incluso un toque de queda en el marco de un Estado de Excepción.
Indicó que los protocolos de bioseguridad han funcionado y en una prueba de antígenos realizada este martes se detectó dos casos positivos por lo que de inmediato se reunió el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Nacional y se determinó que debía suspenderse el juego.
Se indicó que se ha seguido el protocolo y los jugadores han sido aislados ya que se pretende que no se infecten más personas, además están en observaciones quienes estuvieron en contacto con los futbolistas.
Martínez también detalló que Independiente está en libertad de jugar en otro país pero cuando retorne al país los integrantes de la delegación deben realizar una cuarentena de 10 días a fin de descartar un contagio.
El partido se jugará el próximo viernes 9 de abril a las 17h15 de Ecuador en el estadio Defensores del Chaco de Asunción, Paraguay.