La ministra de Gobierno, Alexandra Vela, dio a conocer que pese a las protestas de ecologistas, se colocará radares en el cerro de Montecristi ya que es fundamental para detectar los vuelos de que aterrizan en pistas clandestinas con cargamentos de droga.
Vela indicó en declaraciones para Teleamazonas, que «no solo hay intereses ecologistas» en las protestas y apuntó que que la colocación de los radares implica «un obstáculo para la movilidad de la droga».
«Los radares serán ubicados para impedir que se siga utilizando las pistas en Manabí, deberán respaldar esto que va en beneficio de los manabitas», expresó.
Apuntó que lo sucedido en Montecristi «refleja una situación que se va a presentar en varios sitios del Ecuador, es un área de seguridad nacional, se cuenta con mecanismos para detectar los vuelos de las avionetas que aterrizan en pistas clandestinas».
La ministra aseguró que «la seguridad ciudadana y pública es uno de los ejes más importantes» del Gobierno y por ello hay que considerar que hay delincuencia transnacional, organizada y compleja», y el hallazgo de 9 toneladas de drogas, «refleja que el Ecuador enfrenta un problema mucho más serio que ser un país de tránsito».
Para Vela en el país ya se usa laboratorios, y por ello, «ha escalado el nivel de la inseguridad respecto a este tema, es indispensable contar con otro tipo de programas, plantearemos un plan de carácter global que involucre a todos».
Indicó que no solo hay que contener la delincuencia, que ese solo es un primer paso, pero para erradicar el problema hay que ir más allá con más acciones de parte de la seguridad pública.
Incluso reconoció que la tabla de consumo de droga que se aprobó en gobiernos anteriores incrementó el consumo de drogas, pero eliminarla no es una solución, solo sería una parte.
Expresó que la eliminación de la tabla es un tema que se debe tratar en la Asamblea Nacional y «debe recibirse a los sectores de la ciudadanía que tengan algo que decir, debemos tomar una decisión».
Vela señaló que además hay que trabajar en problemas derivados, como el microtráfico y el consumo de los estudiantes de los colegios, lo que a su juicio no se resuelve solo con la eliminación de la tabla de consumo.