El 31 de agosto de 1997, la princesa de Diana de Gales o también conocida en el mundo como ‘Lady Di’ perdió la vida luego de que el vehículo en el que se dirigía se impactara contra una columna del Túnel de l’Alma.
- En el accidente murieron de forma instantánea el conductor Henri Paul y el novio de Diana, Dodi Fayed.
El sargento Xavier Gourmelon dijo que, posterior al impacto, la princesa Diana «parecía físicamente bien, aparte de un hombro lesionado», todavía estaba,«moviéndose y hablando».
Una vez que la saqué (Diana) ella habló en inglés y dijo, Dios mío, ¿qué pasó?
Entendí lo que me dijo, así que traté de calmarla y la tomé de la mano.
Ya en el Hospital Pitié-Salpêtrière de París, un joven especialista de 33 años, MonSef Dahman, fue llamado para atender a una mujer joven involucrada en un accidente de tránsito.
LAS HERIDAS DE LAS PRINCESA
A la princesa Diana se le realizó una radiografía que arrojó que había sufrido una hemorragia interna. El médico Dahman, explicó que, tras el diagnóstico, se le sometió a un drenaje para extraer líquido de la cavidad torácica y descubrieron una herida grave en la vena pulmonar, a punto de tener contacto con el corazón.
A las 2:15 de la madrugada, la madre de los príncipes William y Harry sufrió un paro cardíaco, lo que hizo a los médicos tomar medidas más extremas.
Dahman, manifestó:
Luchamos duro, lo intentamos mucho, realmente muchísimo. Francamente, cuando estás trabajando en esas condiciones, no notas el paso del tiempo.
A las 4:00 de la mañana el equipo de especialistas llegó a la conclusión de que no podía hacer nada más para revivirla y cesaron todos los esfuerzos.
Así dejó de existir una de las mujeres más queridas y admiradas del mundo.
Por: Mario Bohórquez S.
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