El Parlamento español aprobó definitivamente una ley que despenaliza la eutanasia y regula la ayuda médica para morir como un derecho. La eutanasia se incluyó en la cartera común de servicios del sistema nacional de salud de España, como financiación pública.
El paciente debe ser mayor de edad, nacionalidad española, residencia legal o tener un empadronamiento que evidencie una estadía de más de 12 meses en España. Se puede pedir cuando se sufra una “enfermedad grave o incurable, padecimiento grave, crónico o imposibilitante que afecte la autonomía y genere un sufrimiento físico o psíquico constante e intolerable”.
El trámite consiste en dos solicitudes escritas por el paciente de manera voluntaria, teniendo en cuenta que puede revocarlas o aplazarlas en cualquier momento. El doctor realizará una evaluación sobre su diagnóstico, posibilidades terapéuticas y cuidados paliativos luego de cada una de las solicitudes. Se debe contactar con “médico consultor” para corroborar el cumplimiento de las condiciones. Finalmente, una Comisión de Garantía y Evaluación autorizará el proceso.
El paciente tiene derecho a elegir que el método sea administrado por el personal médico directamente o algo que se pueda autoadministrar.
En ambos casos se debe mantener la observación y el apoyo al paciente hasta el fallecimiento, el cual se considerará legalmente como muerte natural. Si el paciente cumple las condiciones legales y no hay incidencias, podrá recibir la eutanasia unas cinco semanas después de solicitarla.
España se une a Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo, Colombia, Canadá y Nueva Zelanda, quienes son los únicos países que tienen aprobada la eutanasia.
Por: Redacción Cromaclictv
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