La Contraloría General del Estados entró en una autoevaluación con la finalidad de limpiar los indicios de corrupción que ha tenido en las últimas dos administraciones encabezadas por Carlos Pólit y Pablo Celi.
Tanto Pólit como Celi han sido cuestionados por indicios de corrupción, en el caso del primero se encuentra en los Estados Unidos tras huir del país, mientras que el segundo está recluido en la cárcel 4 de Quito.
Pólit huyó de la justicia en marzo del 2017 después de que se descubriera su participación en sobornos para desaparecer glosas en el caso Odebretch, tras lo cual asumió la institución Celi, que también fue detenido el pasado 13 de abril acusado de indicios de corrupción en el caso Las Torres.
Celi habría participado en actos de corrupción en los que además de participar la Contraloría, también están implicados exfuncionarios de Petroamazonas y la Presidencia de la República, durante el mandato de Lenín Moreno.
Por ahora la Asamblea Nacional y el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS) tratan de solucionar la acefalía de la institución, que tiene por ahora a Carlos Riofrío como contralor subrogante.
Riofrío no habló de reestructurar las unidades en las que se tramitan los exámenes especiales a la administración pública, pero no dio detalles de la forma ni cuándo iniciaría esta acción.