Un espaldarazo judicial recibieron este 4 de octubre de 2021 el expresidente Abdalá Bucaram Ortiz y su hijo Jacobo Bucaram Pulley. El juez penal Geovanny Freire decidió absolverlos del proceso por delincuencia organizada, tras concluir la audiencia preparatoria de juicio en Quito, que tomó varios días.
Junto con los Bucaram, fueron sobreseídos dos procesados más: Bryan P. y Verónica A., para quienes el magistrado ordenó además que se les levanten las medidas cautelares en su contra. Hasta el momento, Jacobo Bucaram se encontraba en arresto domiciliario.
El juez Freire sí decidió llamar a juicio al israelí Sheinman Oren y a dos personas más. Luego de conocer el dictamen, la Fiscalía anunció que apelará dicha resolución.
El caso inicia con los allanamientos a la casa del expresidente Bucaram, en junio de 2020, cuando se encontró 5.000 mascarillas, 2.000 pruebas COVID-19 y otros insumos médicos que dieron paso a la comercialización de 21.000 pruebas rápidas, entre marzo y junio de 2020, pero se habría extendido hasta octubre de 2020, en las provincias de Pichincha, Guayas, Esmeraldas y Santa Elena.
El proceso ha sufrido al menos 5 dilaciones, una de ellas derivó en la declaratoria de nulidad por parte de la jueza Verónica Medina, quien luego fue suspendida y que ahora deberá pedir disculpas públicas y reparar económicamente a Jacobo Bucaram por “haberse incurrido en privación de la libertad ilegal y arbitraria”, entre el 25 de junio y el 27 de julio de 2021. La nulidad se dejó sin efecto y se retomó el caso, que ahora tiene 3 llamados a juicio.