¿Parálisis de sueño o se le subió el muerto?
Más de una persona ha sufrido de una noche terrorífica en la que de repente siente que se ahoga producto de la presión de alguien, pese querer moverse y abrir lo ojos, no puede hacerlo y entra en la desesperación hasta que el evento pasa, pero ¿de qué se trata?
Muchas personas atribuyen estos episodios a la parte espiritual, apuntando a que son demonios o «el muerto», quien se sube un atrapa a la persona que llega incluso a sentir golpes, pero la ciencia en cambio apunta a un fenómeno llamado parálisis de sueño.
La solución teológica a estos eventos es la oración antes de ir a dormir invocando a la protección divina incluso con la lectura de pasajes de la Biblia como el Salmo 23.
Pero en cuanto a la ciencia, se apunta a que algunas personas son más propensas que otras a sufrir estos episodios considerando factores como la obesidad, hipertensión y diabetes.
Las principales características de este fenómeno son la inmovilidad, dificultad para respirar y hablar, y no poder «despertar» aunque están conscientes.
Esta situación de falta de control del cuerpo por lo general causa una angustia severa y puede durar desde unos segundos hasta 5 minutos, y por lo general sucede entre el sueño ligero y el sueño profundo.
Los especialistas recomiendan para evitar la parálisis de sueños algunas prácticas como no privarse de dormir por tiempos prolongados, realizar pausas activas para evitar el cansancio y estrés, no dormir boca arriba, hacer ejercicio entre 3 y 6 horas antes de acostarse.
Además se recomienda dormir entre 7 y 9 horas, reducir el estrés, seguir buenos hábitos de alimentación, evitar cenas abundantes, no consumir refrescos, café, chocolate y té antes de dormir. En caso de que persistan los episodios, se debe buscar un especialista.